Acabo de empezar el nuevo curso. Pero no voy a hablar de eso (todavía). Hay que darles un poco de cuartelillo a los profesores.
En cambio voy a hablaros de una profesora que tuve hace dos años. No diré su nombre ni el de la asignatura que impartía, aunque sí mencionaré que dentro del título de la asignatura estaba la palabra “comunicación”.
El caso es que he encontrado la agenda que usaba hace dos años, y en ella he descubierto una página que le dediqué por completo a esta buena mujer, esta comunicadora, que nos había dado perlas como estas:
- Nosotros y nosotras comemos unos determinados alimentos cocinados de unos determinados alimentos.
- Esto es bonitísimo
- Grupos colectivos (frente al grupo individual)
- Líneas no seguidas. (También llamadas intermitentes)
Y no pongo más porque me llevaría muchas líneas contextualizarlas. Pero para que luego se queje la gente de que los jóvenes de hoy en día no estudiamos nada ni nos esforzamos por aprender.
En cambio voy a hablaros de una profesora que tuve hace dos años. No diré su nombre ni el de la asignatura que impartía, aunque sí mencionaré que dentro del título de la asignatura estaba la palabra “comunicación”.
El caso es que he encontrado la agenda que usaba hace dos años, y en ella he descubierto una página que le dediqué por completo a esta buena mujer, esta comunicadora, que nos había dado perlas como estas:
- Nosotros y nosotras comemos unos determinados alimentos cocinados de unos determinados alimentos.
- Esto es bonitísimo
- Grupos colectivos (frente al grupo individual)
- Líneas no seguidas. (También llamadas intermitentes)
Y no pongo más porque me llevaría muchas líneas contextualizarlas. Pero para que luego se queje la gente de que los jóvenes de hoy en día no estudiamos nada ni nos esforzamos por aprender.