Con la cantidad de combinaciones posibles que existen de números de tres cifras, hay una coincidencia chocante con el 118.
Resulta que en Francia el 118 es el número de información telefónica, mientras que en Suiza ese mismo 118 es el número de los bomberos.
En principio esto no debería resultar un problema, dado que son países distintos con habitantes distintos y todo eso. Salvo por la ingente cantidad de franceses que se ha ido a trabajar a Suiza, donde los salarios son más altos.
Los bomberos suizos están hartos de explicarle a la gente que no, no saben cuál es el número de la Carnicería Santoz, ni el del Ikea más próximo, que ellos se ocupan de incendios. In-cen-dios. Esas cosas con llamas y fuego.
De modo que han pensado en qué hacer para que se aprendan la diferencia. Dado que al parecer la gente no es capaz de recordar siquiera que está en otro país, unos simples posters y panfletos no tendrán mucho efecto y han optado por un método de memorización muy efectivo en parvulario: Hacer una canción
Voilà (<-- Hay que pinchar ahí)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Muy curioso, un "artículo" muy curioso. No se donde "pescará" la Dama duende esas cosas que, bien relatadas, como están, nos procuran una sonrisa. El mundo es muy complejo y complicado, y se darán situaciones, y coincidencias como la descrita, con una gran frecuencia. Sigue observando y comunícanoslo.
Los suizos molan.Les habría quedado aún más didáctico si ponen a dos "boys" disfrazados de bomberos.
Publicar un comentario